La despoblación de las zonas rurales y el envejecimiento de la población representan unas de las principales señas de identidad del proceso de transformación social del siglo XXI. Bajo la denominación de economía plateada definimos el conjunto de actividades económicas, productos o servicios pensados para satisfacer y canalizar las demandas y necesidades del colectivo de personas mayores de 55 años. La vitalidad del colectivo y su creciente papel en la economía, refuerzan el reconocimiento de las personas mayores como consumidores, y su papel relevante en la economía local y circular.
Administraciones y empresas, conocedores del cambio de no pocos paradigmas que hasta ahora se presentaban ante la sociedad como incuestionables, deben prepararse para afrontar un nuevo reto. El impacto de la economía plateada transciende del enfoque netamente economicista y se orienta hacia la construcción de un nuevo modelo de organización social, que en estas primeras décadas del siglo XXI comienza a dar sus primeros pasos.